Una entidad presentó en 2017 un escrito inicial de proceso monitorio contra una mujer reclamándole a la misma determinada cantidad, alegando que le había adquirido a un banco un supuesto crédito contra ella por dicha cantidad, pero basándose en un préstamo que otro banco diferente le había concedido a aquella en 1997, y que debía devolverse mediante 36 cuotas mensuales consecutivas hasta Febrero del año 2000.
Formulada oposición a dicha reclamación alegando entre otras cosas prescripción y falta de legitimación activa (por no acreditarse que el banco al que se le había adquirido el supuesto crédito se lo hubiera adquirido a su vez al referido banco prestamista, o que aquél se hubiera subrogado de alguna forma en la posición de éste último en dicho préstamo), y celebrada la pertinente vista de juicio verbal, con fecha 26-4-2018 el Juzgado de Primera Instancia nº 2 de Pamplona dictó sentencia desestimando la demanda de la referida entidad y absolviendo a la demandada, con condena en costas a la demandante.
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